viernes, 27 de julio de 2007

Antecedentes de la semiótica.




• Conocida también como “semiología” esta disciplina se encarga del estudio de los signos.

El signo esta presente en todas y cada una de las actividades que el hombre lleva a cabo en su diario vivir. Podría decirse que es a través del signo que el hombre es capaz de trasformar el entorno en medio y que, además, éste es la base del pensamiento humano y de la comunicación. Cuando asistimos a un cóctel, vemos un comercial, ojeamos una revista, sospechamos de alguien en la calle o, simplemente cuando manifestamos al doctor nuestras dolencias, inconscientemente estamos aplicando la semiótica. En otras palabras podríamos decir que allí donde exista cualquier marca, movimiento corporal o símbolo que trasmita información, ordenes o pueda asociarse con cualquier pensamiento está presente el signo y por ende la semiótica.

De lo expuesto anteriormente puede concluirse que estudiar los signos significa entender la cultura contemporánea en cualquiera de sus manifestaciones. Con toda razón, uno de los mayores teóricos de la semiótica anglosajona llamado Charles Sander Pierce dijo alguna vez que “el mundo era un signo”.
A pesar de que suene reiterativo vale la pena volver a decir que Allí donde algo opere en lugar de otra cosa está presente el signo y por ende la semiótica: termino utilizado comúnmente para referirnos al estudio de la capacidad innata de los seres humanos para producir y comprender signos de toda clase.


Entre todos los animales los hombres somos los únicos seres que hacemos un uso conciente de los signos. Mientras el animal en su entorno hace uso naturalmente del signo, el hombre, es capaz de hacer de éste un material complejo que lo dispone en los actos del habla, la escritura, el arte, los mecanismos de verificación, los diagnósticos medico y, por supuesto los instrumentos de medición.

En este momento bien vale la pena traer a colación la afirmación formulada por el famoso semiólogo francés Charles Morris quien afirmo alguna vez que “la civilización humana dependía de los signos y de los sistemas de signos y que al propio tiempo la mente humana era inseparable del función mentó de los signos”.

Así, de igual forma que un Roll Royce es signo de distinción o el pozo es un signo del principio femenino como fuente de vida, el color rosa es también un signo de lo femenino. En cada uno de estos ejemplos se hace presente la convencionalidad que la cultura ha pactado para convertir a esta marca, a este lugar y a este color en signos que cualquier persona, dentro de un contexto particular, puede leer y entender claramente.
• Como disciplina La semiótica es el análisis de los signos o el estudio del funcionamiento de los signos. La idea de que los sistemas de signos tienen mucha importancia es fácil de comprender; sin embargo, el reconocimiento de la necesidad de estudiar los sistemas de signos es un fenómeno netamente moderno. En razón de ello puede decirse que la semiótica no es una disciplina extraña ni realmente nueva y que ésta es una palabra que aparece en el mundo de la medicina antigua cuyo antecedente tenemos más famoso se remite a un antiguo debate que tuvo lugar entre los estoicos y los epicúreos en el mundo antiguo alrededor del año 300 a.C. en la ciudad de Atenas. En esta epoca la interpretación de los signos estuvo vinculada a saberes de carácter totalmente práctico sobretodo en lo relacionado con el mundo de la medicina. Aunque mucho podría seguirse acotando del vinculo practico de la semiótica y el contexto medico donde se le aplicaba cotidianamente, lo que vale resaltar aquí es que el debate que se llevo a cabo entre estas dos escuelas filosóficas se centro básicamente en la diferencia entre los “signos naturales” (es decir aquellos signos que se manifiestan libremente en la naturaleza) y los “signos convencionales” o signos diseñados específicamente para la comunicación.

A través del siguiente ejemplo es posible dimensionar cómo el síntoma (que es un signo natural) siguió considerándose como el signo “modelo” durante la época clásica.


Signos Cotidianos
Durante mucho tiempo la semiótica estuvo desplegada en un infinito número de actividades sin que sobre ella se hiciera ninguna reflexión teórica. Fue con el auge de las ciencias humanas y de la filosofía en el siglo XIX y XX se propició el desarrollo de las ciencias del lenguaje verbal, tema fundamental de la semiótica. De la visión primaria de entender al “hombre como animal signico o simbólico” que propuso E. Casirer se pasó a proponer, mas bien al signo, como el elemento mínimo de todo sistema de comunicación o de todo lenguaje y aquí, por lenguaje entendemos todos aquellos procesos que se llevan a cabo en la mente para trasformar las impresiones de los sentidos en modelos que el hombre experimenta y en modelos que el hombre recuerda.

La ciencia que estudia al signo como el elemento mínimo de todo sistema de comunicación y de todo lenguaje fue denominada por los franceses como “SEMIOLOGIA”, mientras que, la tradición anglosajona opto por llamarla “SEMIOTICA”. En todo caso, la nueva ciencia llamada de una o de otra forma se ocupa de todos los signos y sistemas de signos o lenguajes y pretende constituirse en su doctrina más general.

• Como tal, la semiótica o semiológia (del griego semeion = signo) tiene importantes antecedentes en la historia de la filosofía y de la ciencia. Escritos de filosofía, gramática, retórica, teología, medicina y juridisprudencia contienen “retazos” de la teoría semiótica tal como la entendemos hoy en día. Tal vez en razón de ello es que se hace tan necesario tirara lazos al pasado para entender la forma en que ésta cobra vigencia en todos los ámbitos de la cultura contemporánea. Si diéramos un vistazo hacia el pasado nos remitiríamos a textos como el “Cratilo” de Platón donde el filósofo plantea el problema de la arbitrariedad o convencionalidad de los signos, pero de igual forma también tendríamos que devolver la pagina y mirar a los estoicos quienes fueron los que sentaron las bases de los procesos sígnicos alrededor de tres elementos claves: el semainon (o estimulo sensorial), el semainomenon (o significado) y el prama (u objeto a que se refiere el semainon a través del semainomenon. Esa misma tridimensionalidad del signo será retomada años más tarde por los filósofos escolásticos y desde allí elaborarán tímidas filosofías del lenguaje que giraran en torno a las diversas relaciones entre significantes y conceptos y a los problemas del metalenguaje (lengua que hablamos y lengua de la que hablamos).

• Dentro de este contexto fueron las enseñanzas de San Agustín (354-430) en la Edad Media las que finalmente sentaron las bases en Occidente para la disquisición sobre los signos. Uno de sus grandes aportes a la cultura en general fue que propuso y desarrolló su teoría de los signa data, o signos convencionales. A diferencia de los pensadores clásicos, él consideró que los signos eran los elementos más adecuados para la reflexión filosófica. San Agustín contribuyó a delimitar el estudio de los signos al expresar que las palabras parecen ser correlatos de “palabras mentales”. Su definición del signo como “algo que, además de la imagen que infunde a los sentidos, hace venir otra cosa al pensamiento” es muy conocida y estudiada.











• Esa misma apreciación fue la que le sirvió al pensador empirista Ingles, Jhon Locke (1632-1704) para hallar la base de una nueva lógica basada en los procesos de significación. En su famoso texto “Ensayos sobre el entendimiento humano” que fue publicado en 1690, este filósofo aborda cuatro temas fundamentales: la existencia de principios e ideas innatas como materia del conocimiento, las palabras como signos de las ideas, el saber y, por ultimo, la probabilidad. El pensamiento de Locke abre la posibilidad a un sistema de conocimientos en el que se contemplan <> modos de razonamiento diferente al que imperaba en la época que era el del método cartesiano, un método que pretendía “guiar bien la razón y buscar la verdad en las ciencias. Dentro de su gran reflexión teórica Locke se preguntaba cómo era que las personas podían tener una conexión inmediata con las ideas y, cómo era que dichas ideas funcionaban como signos naturales de la racionalidad de lo real. Para aproximarse a las respuestas él termina por renunciar a estudiar la cualidad metafísica que produce las ideas en la conciencia y, en su lugar, reivindica que las ideas se experimentan a través de la sensación y la reflexión.

Dentro de sus conclusiones podemos rescatar lo siguiente: que a través de la sensación es posible captar las impresiones del mundo exterior tal como sucede cuando percibimos un determinado color, sabor u olor y que mientras que la reflexión permite conocer las operaciones propias del espíritu.

Pese a que tanto San Agustín como Locke eran ya en cierto sentido proto-semióticos recién en el siglo XX surgió una cabal conciencia semiótica impulsada por dos fundadores: Ferdinan de Saussure y Charles Sander Pierce.

• En 1916 Ferdinan de Saussure propuso que “La lengua era un sistema de signos que expresan ideas y por eso ésta era comparable con la escritura, el alfabeto de los sordomudos, los ritos simbólicos, las formas de cortesía, las señales militares etc. En pocas palabras, podríamos decir que el gran aporte que hizo este pensador suizo a la semiológia fue el de considerar que los signos se encuentran en el seno de la vida social.




Por su parte, Ch. Sander Pierce destacó la función lógica del signo y con ello estableció una completa teoría y división de los signos e introduce la noción de referente.







La visión y fundación moderna de la disciplina semiótica se debe a estos dos teóricos y también, en gran medida a tres famosos médicos: Moreles, Freíd, Holmes. Cherlock Homes por ejemplo, es un famoso personaje del medico y novelista inglés Arthur Conan Doyle.

Desde su presentación en Estudio en escarlata (1887), él aparecería en 68 obras posteriores donde a través de la semiótica y la lectura de signos o indicios resolvía los más inesperados casos. Como dato curioso vale resaltar que, Cansado de su personaje, el Conan Doyle intentó matarlo en Las memorias de Sherlock Holmes (1894). Sin embargo, sucumbió en seguida al clamor de sus lectores y hubo de resucitarle para las siguientes novelas.
A. Conan Doyle nació el 22 de mayo de 1859 en Edimburgo y estudió en las universidades de Stonyhurst y de Edimburgo. De 1882 a 1890 ejerció la medicina en Southsea (Inglaterra).
Estudio en escarlata, el primero de los 68 relatos en los que aparece Sherlock Holmes, se publicó en 1887. El autor se basó en un profesor que conoció en la universidad para crear al personaje de Holmes con su ingeniosa habilidad para el razonamiento deductivo. Igualmente brillantes son las creaciones de los personajes que lo acompañan: su amigo bondadoso y torpe, el doctor Watson, que es el narrador de los cuentos, y el archicriminal profesor Moriarty. Conan Doyle tuvo tanto éxito al principio de su carrera literaria que en cinco años abandonó la práctica de la medicina y se dedicó por entero a escribir. Basándose en los personajes creados por Arthur Conan Doyle, Billy Wilder dirigió en 1970 la coproducción inglesa-norteamericana La vida privada de Sherlock Holmes. En el periodo 1943-1945, el director norteamericano Roy William Neil había filmado por lo menos ocho películas basadas en personajes y textos de Conan Doyle, entre ellas La mujer araña (1944).

Sherlock Holmes resolvía sus casos utilizando la deducción y el razonamiento lógico, métodos que se siguen utilizando en la investigación moderna. Este fotograma pertenece a la película de 1942 Sherlock Holmes and the Voice of Terror, protagonizada por Nigel Bruce y Basil Rathbone. Debido a las exigencias del público, A. Conan Doyle tuvo que resucitar su personaje a través de recursos poco creíbles, pero a la vez de tremendo impacto. Para ello recurrió a los folletines de la época.

Hoy en día es frecuente que los turistas en Londres les soliciten a los taxistas de la ciudad que los lleven a la famosa casa del detective que por supuesto nunca ha existido en realidad.

Por su parte el medico vienés Sigmund Freud, desarrolla una teoría semiótica a partir del psicoanálisis.

Freud parte de la convicción de que los sueños poseen un sentido que requiere ser revelado a través de la interpretación.
En su famosa obra de 1900 ”La Interpretación de los Sueños” Freud asegura que en el sueño siempre manifestamos nuestros más profundos deseos ya sea por la vía preconciente o por la inconciente. Un sueño pudo haber sido provocado durante el día y no haber hallado satisfacción razón por la cual, por la noche aparece manifiesto como un signo del deseo insatisfecho. El mismo sueño pudo haber surgido durante el día, pero fue rechazado por nosotros, por lo cual, el deseo aparece manifiesto en el sueño como un deseo reprimido o insatisfecho. El mismo deseo puede romper el vinculo con la ida diurna y pertenecer a deseos reprimidos que conservamos durante mucho tiempo en nuestro inconsciente. Pero también, el sueño puede proceder de deseos optativos que surgen durante la noche, tales como la sed, la llenura estomacal o la necesidad sexual.Un sicoanalista no trata de reconstruir el sueño como tal sino de leer los signos y las ideas latentes que despertaron ese deseo.
Para Freud, el sueño es una especie de entidad plurisignificante que a manera de texto puede ser interpretado por el psicoanalista y la interpretación se referirá siempre a una historia concreta y singular, aunque el analista se sirva de ciertas estructuras conceptuales que le permitan pensar lo inconsciente.


Mucho podría seguirse acotando sobre estas teorías semióticas, pero en este momento bien vale la pena mostrar cómo la semiótica recientemente se ha dedicado al estudio pormenorizado de los signos gráficos, publicitarios y comerciales y cómo ella se ha convertido en uno de los principales métodos de estudio cualitativo de la creación publicitaria y del diseño comercial (productos, logotipos), por lo menos en Francia.

• Este es el caso de “Semiotic Solutions” (soluciones semióticas) una empresa fundada en Londres por virginia valentine cuyo objetivo es hacer consultorias y asesorias para la creación de estrategias a quienes se dedican al diseño de imagen, la planificación empresarial y el desarrollo de productos. Ella utiliza la teoría semiótica para demostrar a las empresas el modo más simple de lograr el éxito en sus campañas una vez desentierra las minucias de la cultura contemporánea y las trasforma en la base de una campaña. En su estudio del uso del teléfono que encargo Telecom esta empresa analizó en detalle la oposición binaria “conversación importante “ / “Conversación trivial”. Desde siempre la “conversación importante “había sido asociada con lo importante( con lo Masculino, Serio, oficial, correcto y, ante todo, significativo) Por su parte, la conversación femenina se asociaba con lo trivial y se le presentaba como lo Intrascendente, lo metafórico, lo banal, lo popular, lo intempestivo y, por ende con lo “incorrecto”.

A través de este juego de opuestos la campaña semiótica fue dirigida a eliminar el prejuicio sexual que convirtió a los teléfonos en el ámbito de la “Conversación Importante” dominada por el sexo masculino. Dicha campaña fue todo un éxito y demostró cómo todas las personas estamos todo el tiempo directa e indirectamente relacionados con la semiótica, y es que como dijo Umberto Eco (el semiólogo más importante de la actualidad) : “La semiótica es la historia misma” y ello es verdad gracias a que la semiótica proporciona un lenguaje general que se aplica a cualquier signo o lenguaje especial y también porque ésta se aplica al lenguaje de la ciencia y a los signos específicos que ella utiliza.



Taller- Cuestionario. Tema 2. Prehistoria y conceptos básicos de la semiótica
• 1. defina que es semiológia.
• 2. explique la diferencia entre semiológia y semiótica.
• 3. diga cuales han sido los conceptos de la filosofía clásica y escolástica que han contribuido a la Fundamentación teórica de la semiótica o semiológia.
• 4. Señale cuales han sido los aportes de F. de Saussure y de Ch. S. Pierce a la disciplina en mención.
• 5. enuncie la definición más sencilla de signo.
• 6. coloque la imagen de 10 ejemplos de signos e investigue una breve historia de cada uno.
• 7. cual es el origen de la palabra “semiótica”, cual es su objetivo y qué quiere decir.
• 8. en qué se basó la disputa entre estoicos y epicúreos.
• 9. Qué son signos convencionales y signos naturales.
• 10. Cual es el papel de los signos a la hora de construir una imagen gráfica.

miércoles, 18 de julio de 2007

TALLER 2: La Comunicación

Responda detalladamente todas y cada una de las siguientes preguntas:

1. Defina qué es la comunicación

2. Defina qué es la comunicación gráfica

3. Determine cuales son los elementos de la comunicación.

4. Cual seria la “fuente” en el caso de de la comunicación entre humanos y de un periódico.

5. Por medio de un ejemplo defina qué es la interferencia

6. Qué podría entenderse por interferencia cuando alguien observa un afiche, una pagina Web, lee un periódico y cuando ve un programa en la televisión.

7. Qué son los ruidos físicos y qué son los ruidos psicológicos

8. Que relación encuentra entre semiótica y comunicación

9. Haga el modelo comunicativo que Shannon y Weaber propusieron para explicar cómo se trasmitían las señales tomando como ejemplo el flotador de una represa.

10. Qué significa “intensión” con “S”.

11. Qué seria el “mecanismo de defensa” cuando a alguna persona en la calle se le intenta entregar un volante de mano

12. Qué es el punto de contacto y ponga un ejemplo para el mundo grafico donde el punto de contacto no se establezca por completo.

13. Explique la frase “todo acto lingüístico tiene cabida dentro de lo semiológico, no todo acto semiológico llega a traducirse a lo lingüístico”

14. Qué es el referente y ponga un ejemplo.

15. Diga que es El referente presente

16. Diga que es El referente ausente

17. Diga que es El referente conocido por el receptor

18. Diga que es El referente conocido por el emisor

19. Diga que es El referente conocido por ambos

20. Diga que es El referente desconocido por ambos

PARA TRAER A CLASE:

1. ubique tres imágenes en las que aparezca un gesto, una sonrisa y un grito y diga qué significación tienen cada una de ellas de acuerdo con la finalidad que tuvo el emisor para “trasmitir” del mensaje.

2. Coloque un ejemplo grafico donde se haga referencia al “lenguaje de las caricias”

3. Para cada uno de los siguientes referentes ubique una imagen donde aparezca una (una alusión, una copia y un plagio) de otros textos imágenes.


La Comunicación


AUGUSTO SOLÓRZANO

Magíster en estética

18-07-07

Para analizar una imagen bajo los parámetros semióticos es necesario en primer lugar recurrir a ciertos fundamentos teóricos que la lingüística utiliza a la hora de describir los elementos gramaticales de la lengua. Para nosotros, los hombres contemporáneos, nos resulta bastante familiar, pero antes de la década de los cincuenta, cuando aun no se había cimentado las bases de la teoría semiótica y sus infinitas aplicaciones en el campo de la imagen ello resultaba bastante desconocido.

Fue Roland Barthes quien en Francia se dio a la tarea de resaltar que el lenguaje más que ser un simple fenómeno natural era más bien un conjunto de signos convencionales de los que hacia uso toda una sociedad para la comunicación en general. Una serie de ensayos que fueron publicados en 1957 bajo el titulo de “Mitologias”, Barthes se dedica a analizar cómo la semiótica concierne por igual a las actividades populares entre ellas el catch o la lucha libre, la publicidad, la moda y, no solamente a ciertas actividades intelectuales ligadas al estudio de la lengua y la lógica.

En esencia, podría decirse que uno de los grandes aportes de este autor fue el de aplicar las teorías lingüísticas que habían sido propuestas tiempo atrás por Ferdinand de Saussure a la cultura popular; en otras palabras, Barthes lo que hizo fue traducir los términos abstractos de la lingüística a las experiencias cotidianas.

Fue así como la imagen empezó a ser analizada bajo la lupa lingüística y empezó a ser asociada con la noción de “texto”. Al igual que sucede en la lingüística donde el texto no consiste simplemente en un efecto de sentido global sino que es la sumatoria de efectos de sentidos locales que produce, con la imagen sucede exactamente igual. Uno y otra están construidos según una arquitectura interna que se encarga de ordenar todos y cada uno de los signos que operan en su interior, así como también de proyectarlos hacia el exterior donde serán leídos por un lector abstracto o, empírico.

La imagen como texto visual contiene en su interior las trazas de su maquina comunicativa a partir de las cuales es posible hacer referencia a las teorías reveladas o implicadas que operan sobre su propia interpretación. Es allí donde la semiótica tiene la posibilidad de interpretar y establecer lazos reflexivos sobre los fundamentos sobre los cuales está construida la imagen y de cómo ésta es leída y asimilada por el público receptor.

Una imagen vista como texto puede definirse como una gran retícula cuya trama se liga a otras tramas de textos precedentes que han sido construidos para la producción de efectos estéticos locales o globales. Cada texto imagen evoca a su vez un sinnúmero de textos que trasforman su naturaleza y su funcionalidad gracias a las diferentes alusiones, citas, copias y plagios de otros textos imágenes.

Generalmente el texto visual no depende de una estructuración arbitraria de lo que la imagen en sí misma expresa sino de un contrato comunicativo basado generalmente en la verosimilitud que se da entre la forma en que se representa la imagen y los objetos del mundo natural. Esto no parece ocurrir frecuentemente con los textos verbales en los que lo que se expresa puede ser independiente del texto y estar fundado simplemente en la propiedad enciclopédica en la que una palabra nos puede remitir a otra y así sucesivamente.

LA COMUNICACIÓN GRAFICA

Es frecuente que el proceso comunicativo de la imagen siga aun siendo explicado bajo los parámetros del modelo ingenieril que diseño Claude Shannon y Warren Weaver quienes en 1950 fueron contratados por una empresa telefónica para que explicaran detalladamente cómo era que se llevaba a cabo el proceso de comunicación telefónico.

El famoso modelo comunicativo de Shannon y Weaver identificaba dos elementos básicos presentes en todo acto comunicativo: La fuente, persona u objeto que informa, y El destinatario, el que recibe la información; de allí se infiere que el acto de comunicar presupone obligatoriamente la condición mínima de que exista una fuente de donde se emite la información y un destinatario que se encarga de recibirla y procesarla.

Los modelos de comunicación que se ocupan inicialmente de la transmisión matemática de señales suelen representar el proceso en una disposición lineal desde una fuente hasta llegar a un destinatario.

Desde allí nos podemos figurar el “mecanismo” de la comunicación mediante el siguiente esquema:


Con el tiempo, este modelo comunicativo propuesto por estos dos ingenieros electrónicos terminó por convertirse en la base general de toda teoría de la comunicación, incluso para el campo grafico. Si bien éste opera perfectamente en el ámbito de transmisión de las señales que se trasmiten por un canal perfectamente determinado, en el campo de la comunicación grafica dicho modelo queda corto, pues una pagina Web, un afiche, un logotipo o un comercial publicitario suscitan en el receptor respuestas e interpretaciones impredecibles que hacen que el paradigma comunicativo se abra en muchos sentidos. En el caso de la comunicación grafica no es posible hacer referencia de un receptor “pasivo”, pues éste termina controlando, trasformando, seleccionando y, sobre todo, redireccionando permanentemente los contenidos del mensaje.

El modelo de Shannon y Weaver difícilmente también aplica para la comunicación humana que a diario se lleva en la vida cotidiana dado que este proceso se abre en muchos sentidos formándose una especie de red en la que cada mensaje verbal está acompañado de gestos, olores, actitudes, tonos de voz y un sin numero de cualidades que hacen que éste sea leído interpretado y redireccionado de múltiples maneras. En el caso de la comunicación humana al igual que la imagen visual el receptor y el emisor se comportan como una especie de editores de la comunicación que permanentemente deciden qué parte del mensaje quieren recibir; así, es que uno y otro se convierten en el contenido real de la información.

Cuando se establece un contacto entre un emisor y un receptor y si los niveles de ruido permiten establecer un comunicación, el reto de este último (el receptor) consiste en descodificar o interpretar el mensaje que le ha sido enviado como por ejemplo cuando alguien nos regala un abrazo, una sonrisa o un gesto de cariño fácilmente podemos deducir qué tipo de mensaje se nos esta enviando así éste no venga acompañado de un gran discurso verbal.

El origen de la palabra “Comunicar” se remonta al latín Communicare y significa “poner en común algo”. Así, la esencia el concepto de trasmitir información resulta ser el mismo para la lengua que para la imagen y, tal vez desde allí, es que se insiste permanentemente en la aplicación del modelo ingenieril para explicar cómo funciona el proceso de comunicación grafico.

La vida de cualquier sociedad no es más que el intercambio reciproco de signos que tienen como sustrato significativo el sentido que la comunidad usuaria le haya asignado a esos medios o instrumentos de comunicación. En el caso de lo grafico específicamente, en el caso de las imágenes, los textos y los signos hacen parte de ese sustrato semántico, estético y significativo con las que a diario se relaciona el espectador. Cada forma, color, textura, o efecto que configura la imagen hace parte de esa arquitectura que es la que finalmente estructura la imagen como tal. En otras palabras todas y cada una de estas características antes mencionadas son signos que relacionamos con las experiencias del mundo empírico y de la realidad visible. En nuestra mente existen esquemas icónicos que nos ayudan a reconocer y a sentir cierto placer sensual cuando re-conocemos las formas que ya hemos visto en la realidad. Podemos decir que el sinnúmero de palabras, formas y colores hacen parte del código o sistemas de signos y reglas comunes que se establecen entre el emisor y el receptor. Que el negro signifique en nuestra cultura luto y que el luto en la india sea el blanco, color opuesto al negro, es tan solo un simple ejemplo de los alcances que tienen la puesta en marcha de las reglas comunes que atañen a toda una comunidad.

Dentro del proceso de comunicación parece prevalecer la ley del menor esfuerzo ya que casi siempre el emisor recurre y elige el sistema o los sistemas que más le convienen a la hora de trasmitir la información, ya sea porque los conoce muy bien, o ya porque son los más adecuados para el momento. Vale aclarar que el conocimiento que se tiene del código o de las reglas comunes que rigen a toda una colectividad jamás es suficiente. Nadie por más que conozca muy bien su lengua, podrá comunicar todo lo que tiene. Siempre quedara, un rezago, un algo incomunicado.

El proceso de comunicación que intenta establecer un emisor a la hora de entablar un diálogo que es conocido como “intensión”, (esta intensión se escribe con “s” porque viene del latín “tensum” que significa “ir a”, “tender a”, “buscar a), puede verse interrumpido por unos obstáculos llamados ruidos o interferencias los de carácter físico que resultan del ambiente de la comunicación, como el ruido de un avión que pasa a baja altura, el ladrido de un perro o el encendido de un motor o, simplemente, cuando al estar hablando por teléfono la señal falla y se torna molesta y, los de carácter psicológico (también conocidos como “mecanismos de defensa”) que son básicamente un conjunto de fuerzas inconscientes e incontrolables que despliega el individuo para impedir que la comunicación se lleve a cabo.

Aunque en la vida cotidiana hay códigos que nos son muy familiares, otros tantos no lo son. Por ejemplo, la experiencia que cada usuario tiene de su lengua es personal y única, de tal manera que el contenido de los signos que diariamente utiliza se rige única y exclusivamente por su experiencia con el entorno donde lleva a cabo su vida concreta. Para que el proceso de comunicación se pueda llevar a cabo es necesario que entre el emisor y el receptor exista un punto mínimo de contacto a partir del cual, se pueda establecer la comunicación. En el caso de un sacerdote que habla sobre el comportamiento de los esposos o cuando a un niño huérfano se le intenta explicar la religión asociando a Dios con un padre la comunicación carece de ese punto mínimo de contacto.

Por supuesto también existen formas de la comunicación que escapan por completo a este sistema comunicativo y la razón es porque si bien, todo acto lingüístico tiene cabida dentro de lo semiológico, no todo acto semiológico llega a traducirse a lo lingüístico. Este es el caso del “Lenguaje de las caricias” que aparece al final de la película “El Ultimo Tango en Paris”. En ella desaparecen las palabras y en su lugar, se muestra cómo las caricias se convierten en las verdaderas protagonistas del acto comunicativo que en este caso es el amor.

Cuando una relación entre un emisor y un receptor se ve interferida se debe básicamente a problemas del contexto donde se lleva a cabo el acto comunicativo. Una valla o una señal a una altura que no puede ser captada por los compradores de un supermercado, una revista mal ubicada en un anaquel, la elección de una tipografía demasiado adornada, un mal color dispuesto en una portada, un logotipo demasiado colorido, complicado y confuso son solo algunos ejemplos de la interferencia comunicativa a nivel gráfico.

Por su parte, el referente es el objeto a que se refiere o del cual habla el mensaje que trasmite el emisor. La comunicación solo es posible cuando el emisor reconoce el objeto referente, dicho de otra forma, cuando se conoce aquello de lo que se trata la comunicación. El referente se presenta de varias formas:

El referente presente se da cuando los actores ven el objeto de la comunicación. Ni el emisor ni el receptor tienen que imaginar los objetos o referentes de la conversación. Aquí la posibilidad de equivocaciones disminuye sustancialmente. Como ejemplo, podemos citar la conversación que surge entre dos personas que están bieldo un partido de fútbol.

El referente ausente: Cuando no es actualmente perceptible. Es la conversación de dos personas que han tenido las mismas experiencias sobre un partido de fútbol y conversan sobre él al día siguiente. Aunque el referente es el mismo para ambos, la actitud, el aprecio, la intensidad del gusto son muy distintos para cada uno.

El referente conocido por el receptor cuando solo el individuo a quien se dirige el mensaje sabe a cerca de lo que están comunicando. Es el caso de un sacerdote que sin tener experiencia en cuanto al matrimonio ayuda a resolver problemas maritales. En este caso, el emisor tendrá que ayudarse de la imaginación para mantener el dialogo comunicativo.

El referente conocido por el emisor se presenta cuando solo el iniciador del dialogo sabe de lo que se esta hablando. Por ejemplo cuando alguien habla de un paseo que acaba de realizar. En este caso el receptor es ignorante de la intención y del contenido comunicativo del emisor.

El referente conocido por ambos Es el caso del partido de fútbol presenciado por el emisor y el receptor citado anteriormente.

El referente desconocido por ambos Es caso de la comunicación que se basa en la mayoría de los casos en las hipótesis para mantener el dialogo: por ejemplo cuando dos personas hablan del cielo.


viernes, 13 de julio de 2007

Bienvenidos Estudiantes:

En este blog ustedes deben registrar todos y cada uno de los talleres que se proponen en el programa del curso afín de socializar las imagenes y opiniones sobre ellas. Recuerde que el exito del curso depende en gran medida del empeño de todos y cada uno de nosostros. Por lo tanto los invito a trabajar fuertemente y con la mayor disponibilidad del mundo. En el espacio dispuesto para la etiqueta ustedes deben poner el nombre del ejercicio. Gracias.